David Beckham ficha para el PSG francés

París, 31 ene (EFE).- La llegada del inglés David Beckham al París Saint-Germain animó el mercado invernal de fichajes en Francia, marcado hasta entonces por la venta de jugadores más que por la compra.

El jugador, de 37 años, que llegó libre tras haber acabado hace tres meses su contrato con Los Ángeles Galaxy y que cobrará, según los medios galos entorno a 800.000 euros mensuales, marcó con su mediático nombre las últimas horas del mercado.

Beckham llegó en el último momento y acaparó todos los focos mediáticos, más por el «glamour» que arrastra que por la aportación deportiva que supone su fichaje.

Eclipsó incluso a Lucas Moura, el joven brasileño de 21 años que desembarcó en el PSG en diciembre pasado y por el que los propietarios cataríes del club pagaron al Sao Paulo 40 millones de euros, el mayor desembolso efectuado en la historia por un traspaso entre Europa y Brasil.

La perla del fútbol brasileño, que muchos comparan con el mediático Neymar, tendrá ahora que aplicarse a fondo en el terreno de juego para poder brillar en medio de la estrella que acompaña a Beckham.

Esos dos nombres fueron la principal novedad del mercado invernal, marcado en el resto de los clubes por el éxodo de jugadores, símbolo de la crisis económica que vive el fútbol francés.

Cuatro internacionales galos que militaban en clubes del país, Mathieu Debuchy, Moussa Sissoko, Mapou Yanga-Mbiwa y Loïc Rémy han abandonado el fútbol galo en dirección a Inglaterra, mientras que Yann M’vila, suspendido de las selecciones nacionales por un caso de indisciplina con la sub-21, aterrizará en el Rubin Kazan ruso.

Los tres primeros, procedentes respectivamente del Lille, Toulouse y Montpellier, vestirán la camiseta del Newcastle, mientras que el cuarto, que hasta ahora jugaba en el Olympique de Marsella, se ha enrolado en el Queens Park Rangers.

La salida de estos cuatro futbolistas, convocados a menudo con la selección, muestran bien que el mercado invernal de fichajes ha estado marcado por las ventas, hasta el punto de que el diario «L’Équipe» lo compara con el éxodo que vivió el fútbol galo en los años 90, cuando se dictó la «sentencia Bosman» que derribaba las fronteras futbolísticas europeas.

Incluso el todopoderoso PSG, respaldado por los petrodólares cataríes (o gasodólares, como afirmaba esta semana la revista «France Football» al denunciar la compra de los votos para albergar el Mundial de 2022 en el emirato) ha vendido a jugadores de gran valor.

Guillaume Hoarau, ensombrecido por Slatan Ibrahimovic, se ha marchado al Dalian Aerbin chino; su compañero brasileño Nene, que no contaba para Carlo Ancelotti, jugará a partir de ahora en el Al-Gharafa catarí; el internacional uruguayo Diego Lugano fue cedido al Málaga.

El otro gran club galo, el Lyon, que rivaliza con el PSG en la primera plaza de la liga, ha optado por una estrategia vendedora en este mercado invernal de fichajes.

El club se ha desecho del brasileño Michel Bastos, cedido al Shalke 04.

Entre las pocas incorporaciones interesantes del mercado de fichajes, a parte de las del PSG, figuran la de la joven promesa uruguaya Diego Rolán, que a sus 19 años ha fichado por el Girondins de Burdeos para afrontar la aventura europea. EFE

* Foto difundida por EFE

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