Londres, 30 sep (EFE).- Aviones de la Fuerza Aérea Británica (RAF) atacaron hoy por primera vez posiciones del grupo extremista Estado Islámico (EI) en Irak después de que el Parlamento del Reino Unido diera luz verde a esos bombardeos el pasado viernes.
Aviones de combate atacaron a un vehículo y una posición armada tras varios días en los que las misiones de la aviación británica se habían limitado a vuelos de reconocimiento para detectar posibles objetivos, informó hoy el ministerio de Defensa británico.
Los dos «ataques de precisión» contra los yihadistas se llevaron a cabo «con éxito, según la evaluación inicial», y los dos aviones han regresado sin incidencias a la base de Akrotiri, en Chipre, resaltó el ministro de Defensa, Michael Fallon.
Ambos cazas habían iniciado hoy una nueva «misión de reconocimiento armada» cuando las tropas kurdas en el noroeste de Irak pidieron su ayuda para repeler un ataque.
Los objetivos a los que dieron alcance los aviones de la RAF eran una «posición de armamento pesado» y una «furgoneta armada», aseguró Fallon, que la semana pasada avanzó que la información que aportan los servicios de inteligencia iraquíes es clave para la misión militar internacional liderada por Estados Unidos.
«Cuando llegó al punto indicado, la patrulla de la RAF, utilizando su sistema de fijación de objetivos Litening III, identificó una posición de armamento pesado del EI que amenazaba a las tropas kurdas sobre el terreno», relató en un comunicado el ministerio de Defensa.
«Un misil guiado Paveway IV fue utilizado para atacar esa posición del EI. Tras esa acción, la patrulla identificó una furgoneta del EI armada en la misma zona y efectuó un ataque contra ella utilizando un misil Brimstone», añade la nota del ministerio.
Por su parte, el ministro de Exteriores británico, Philip Hammond, había advertido hoy de que es necesario un «proceso de vigilancia, recogida de datos información secreta y de síntesis» antes de lanzar ataques en Irak.
Hammond subrayó que los aviones de la RAF deben estar «totalmente seguros» de que atacan objetivos del EI para «no matar a civiles suníes inocentes en áreas ocupadas por el EI».
«Si no, vamos a obtener el efecto contrario al que pretendemos», razonó Hammond.
El Reino Unido decidió el viernes unirse a los ataques estadounidenses que comenzaron a principios de agosto en Irak, si bien se mantendrá por el momento apartado de las misiones en Siria.
El primer ministro británico, David Cameron, argumentó en la Cámara de los Comunes que la petición oficial de ayuda que lanzó el primer ministro iraquí, Haider Al Abadi, sirve de base legal para bombardear posiciones del EI en suelo iraquí, mientras que el régimen sirio de Bachar al Asad no ha pedido ayuda para combatir a los extremistas. EFE