El ministro de Relaciones Laborales Carlos Marx Carrasco confirmó esta mañana, en Ecuavisa, que el presidente enviará reformas puntuales al Código del Trabajo actual, en lugar de plantear la aprobación de un nuevo Código integral en esta materia, como en principio lo había planteado el gobierno con la presentación del borrador del nuevo cuerpo legal.
Dicho borrador de código mereció el rechazo de la dirigencia sindical y fue una de las plataformas de lucha de la marcha obrera realizada el pasado 17 de septiembre en las principales ciudades del país. Carrasco ha explicado hoy que ya no se planteará la aprobación del nuevo código, «en aras de la paz». El ministro ha responsabilizado a los líderes de los trabajadores porque «están echando por la borda una oportunidad histórica de tener un nuevo Código».
Carrasco ha dicho que «a la restauración conservadora no le gusta el nuevo Código». Ha reconocido que todo reforma implica cierto desgaste para el gobierno, pero «el desgaste no necesariamente significa que se pierda el apoyo ciudadano».
En la última sabatina, el presidente de la República ya anunció que se descartaría la aprobación del nuevo Código del Trabajo debido al rechazo que se ha presentado. Carrasco ha dejado en las manos del presidente qué tipo de reformas puntuales serán planteadas a la Asamblea en los próximos días.