Hoy los cabos primeros Jorge Manuel Guaquipana Chimbo, y Eduardo Rodríguez, reciben felicitaciones de la gente y de sus compañeros de profesión por ser los protagonistas de una historia emocionante, y poco común.
Este caso se dio durante el feriado en la provincia de Los Ríos. Ellos auxiliaron a una mujer de 21 años que terminó dando a luz a su bebé al interior de un patrullero de Policía.
Todo empezó el domingo al mediodía, luego que la chica y su esposo, un agricultor de 23 años, solicitaron ayuda a los uniformados para que los trasladen en el patrullero hasta el Hospital de Babahoyo, en vista que en ese poblado la clínica y el único subcentro de salud, no estaban atendiendo.
En ese instante, los agentes del orden embarcaron a la joven en el asiento trasero de la camioneta doble cabina junto a su esposo, y salieron con destino a Babahoyo que está localizado a 30 minutos. En el trayecto los nervios pusieron sobre un hilo el alma del esposo de la chica, quien no sabía cómo actuar al escuchar que la madre de su hijo se retorcía de los fuertes dolores.
El cabo primero de Policía, Eduardo Rodríguez,aceleraba la marcha del patrullero (120 kilómetros por hora) para llegar pronto al hospital.
Mientras que el cabo primero Jorge Manuel Guaquipana Chimbo, quien iba de copiloto, trataba de calmar a la joven y le pedía que respirara profundo.
Sin embargo, la chica no pudo más, y terminó alumbrando a su hijo a mitad del camino. En este momento de tensión, Víctor Reyes, esposo de la chica, junto a los policías, envolvieron al bebé con una sábana y le limpiaron la carita.
Luego del parto, los agentes del orden se mostraban contentos porque lograron salvar una vida, pero al mismo tiempo se sentían impotentes porque no contaban con los implementos necesarios para cortar el cordón umbilical.
Cuando el patrullero avanzaba por el recinto Las Amazonas, con dirección a Babahoyo, se encontró con una ambulancia del Ministerio de Salud Pública, que ya había sido notificada de esta emergencia y trasladó al bebé y su madre al hospital Martín Icaza, para los cuidados necesarios.
Allá los médicos le realizaron el corte del cordón y se extrajeron la placenta, bajo todos los niveles de seguridad.
El director de la casa de salud, el doctor Enrique Icaza Villalba, reveló que la señora Marilin Villamar, junto a su pequeño bebé, estaban en excelente estado de salud. Y esa era la razón por la que el mediodía de este martes recibieron el alta médica.
Hasta esta casa de salud también llegaron los dos uniformados que en primera instancia ayudaron a la joven, y señalaron que jamás pensaron tener este tipo de experiencia.
Luego como un gesto de solidaridad, en el mismo patrullero trasladaron a los esposos y al bebé hasta el recinto Los Laureles, situado a pocos minutos de la población de Mata de Cacao, lugar donde habitan.
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texto y foto tomados del Ministerio del Interior.