SAO PAULO (AP) — Equipos de la liga brasileña de fútbol serán despojados de puntos si no pagan puntualmente a sus jugadores.
Los clubes podrían perder hasta tres puntos por cada partido jugado mientras se deban salarios, informó la Confederación Brasileña de Fútbol. Los equipos seguirán perdiendo puntos en tanto persista el adeudo.
Los jugadores tendrán el derecho de denunciar a los clubes cuando el pago se retrase por 30 días. Tras ser denunciado y ser declarado culpable por un tribunal deportivo, el equipo tendrá 15 días para cubrir los adeudos y evitar la sanción.
La regla aprobada esta semana es la primera en su tipo para la liga brasileña, algunos de cuyos equipos han enfrentado graves dificultades financieras en años recientes.
«Nadie quiere que los equipos sean sancionados por esto. Todo lo que queremos es que los equipos paguen a tiempo», dijo Rogerio Caboclo, director de finanzas de la confederación.
Clubes tradicionales como Santos y Botafogo fueron demandados recientemente por jugadores a quienes se adeudaban sueldos. A algunos se les permitió rescindir sus contratos y buscar nuevo club. Cuatro integrantes del Botafogo salieron del equipo tras ganar litigios en el tribunal mientras que Santos, donde Pelé forjó su leyenda en la década de 1969, perdió a su arquero y volante titulares.
«Tenemos que pensar en nuestro futuro», dijo el arquero Aranha, quien pasó al rival Palmeiras.
Palmeiras, ganador de la mayor cantidad de títulos nacionales, hace poco se convirtió en el primer equipo que crea un tope salarial y un contrato para jugadores basado en su productividad.
Entre los otros clubes que tienen problemas por los elevados salarios se encuentran Gremio, Fluminense y Corinthians. Sao Paulo, ganador de seis títulos, admitió recientemente que no ha podido cubrir los adeudos con sus jugadores por derechos de imagen.
Los sueldos de los jugadores son tan elevados que en ocasiones los clubes ceden en préstamo a los jugadores pero tienen que seguir pagando parte de sus salarios. Corinthians aún paga parte del salario del atacante del Sao Paulo Alexandre Pato, mientras el Santos aún cubre parte del sueldo del atacante del Cruzeiro Leandro Damiao.
En Brasil un jugador importante puede ganar entre 200.000 y 350.000 dólares mensuales, pero muchos clubes se niegan a firmar nuevos contratos con jugadores que piden esos salarios. Los futbolistas tienen que buscar clubes del exterior para mantener sus ingresos, así el argentino Darío Conca salió del Fluminense para unirse al fútbol chino mientras el Corinthians está en riesgo de perder al atacante peruano Paolo Guerrero.
El movimiento «Sentido común», creado por algunos de los mejores jugadores del país para mejorar las condiciones del fútbol brasileño, se quejó por la nueva regla de la Confederación «expone» a los jugadores al obligarlos a denunciar públicamente a sus propios equipos. El organismo desestimó el señalamiento al señalar que el sindicato de jugadores también podrá denunciar a los clubes.
La nueva regla aplica para la primera, segunda y tercera divisiones.