BAKU, Azerbaiyán (AP) — Era un circuito desconocido pero un escenario familiar durante las prácticas del viernes del Gran Premio de Europa, en las que Mercedes dominó a sus rivales con Lewis Hamilton por delante de su compañero de equipo, y líder del campeonato, Nico Rosberg.
El sinuoso y disparejo circuito callejero de Baku vio como muchos de los pilotos a menudo se salían de la pista y tocaban con los muros, y es por ello que la esperanza de los rivales de Mercedes de que el trazado único pueda meterlos a la lucha por el campeonato, parece en vano.
Hamilton tocó con un muro y se perdió el final de la primera sesión debido al desgaste excesivo en los neumáticos, pero al final de la segunda sesión su tiempo de 1 minuto 44,223 segundos fue siete décimas de segundo mejor que el de Rosberg, quien no tuvo la oportunidad de responder debido a una falla mecánica.
La férrea competencia que han presentado Red Bull y Ferrari en las últimas dos carreras en Mónaco y Montreal llevaba consigo la promesa de una carrera más disputada en Azerbaiyán, pero la amenaza no se presentó.
Daniel Ricciardo, de Red Bull, perdió la llanta trasera derecha al tocar de lado una barrera en la primera sesión, pero gracias a un excelente trabajo de sus mecánicos, pudo volver a pista al inicio de la segunda fase, en la que terminó en décimo puesto, más de dos segundos atrás de Hamilton.
Su coequipero, Max Verstappen, sufrió de problemas con una fuga de aceite en el embrague, por lo que estuvo en el garaje durante gran parte de la sesión matutina, y luego cerró su participación siendo apenas un poco más veloz que su compañero de equipo, con el séptimo mejor tiempo.
«La pista es muy desafiante y eso es bueno», dijo Ricciardo. «Combinada con el bajo nivel de agarre, definitivamente dificulta encontrar una buena puesta a punto. Hoy no creo que la hayamos encontrado». (D).