GINEBRA (AP) — El presidente catarí de Paris Saint-Germain, una de las nuevas potencias del fútbol europeo, es investigado por las autoridades suizas por sospechas de estar involucrado en el soborno de un ex funcionario de la FIFA para conseguir los derechos de transmisión de la Copa del Mundo.
La fiscalía suiza anunció el jueves que abrió causas penales contra Nasser Al-Khelaifi, presidente del PSG y director ejecutivo de la empresa catarí BeIN Media Group, además del ex secretario general de la FIFA Jerome Valcke y un “empresario del sector de los derechos deportivos” que no fue identificado.
El caso tiene que ver con la venta de los derechos para los cuatro próximos mundiales, a partir de 2018 y hasta 2030.
La causa contra Al-Khelaifi es uno de los primeros vínculos directos con Catar de las abarcadoras pesquisas por corrupción en la FIFA que se realizan en Estados Unidos, Francia y Suiza, y que incluyen sospechas de irregularidades en las campañas para elegir las sedes de los mundiales de 2018 y 2022 que fueron otorgados a Rusia y Catar, respectivamente.
Las oficinas de BeIN Sports en París fueron allanadas por dos magistrados de la fiscalía financiera de Francia, dijo esa agencia. También participaron agentes de la unidad anticorrupción.
En tanto, hubo allanamientos de propiedades en Grecia, Italia y España, mientras Valcke era interrogado en Suiza, señaló la fiscalía federal suiza. El operativo contó con la cooperación de la agencia de investigaciones criminales de la Unión Europea.
“Se allanaron varias propiedades, se confiscaron activos y se realizaron entrevistas”, dijo en un comunicado el organismo continental conocido como Eurojust.
PSG rehusó comentar al respecto.
Al-Khelaifi habría ofrecido a Valcke “beneficios inapropiados” a cambio de los derechos de transmisión “para ciertos países” de los mundiales de 2026 y 2030.
Al-Khelaifi y Valcke habían negociado anteriormente un acuerdo por los derechos de 2018 y 2022, apenas unas semanas después que Catar obtuvo la sede de 2022. En enero de 2011, la FIFA anunció que Al Jazeera Sports, la cadena que después se convirtió en BeIN, había comprado los derechos para 23 territorios en el Medio Oriente y el norte de Africa, incluyendo Arabia Saudita.
La FIFA nunca anunció si BeIN también había adquirido los derechos para 2026 y 2030.
Los fiscales suizos también acusaron a Valcke de recibir “beneficios inapropiados” del empresario no identificado a cambio de los derechos de los cuatro mundiales entre 2018 y 2030.
La causa criminal fue abierta el 20 de marzo, pero no fue anunciada hasta el jueves.
Al-Khelaifi se ha convertido en años recientes en uno de los hombres más poderosos del fútbol, al gastar sumas de dinero estratosféricas para transformar a PSG en una potencia mundial. Este verano, el club francés rompió el récord para el fichaje más caro al pagar 222 millones de euros (262 millones de dólares) al Barcelona por el astro brasileño Neymar.
Desde que el comité ejecutivo de la FIFA eligió a Rusia y Catar como anfitriones en 2010, el emirato que tiene enormes reservas de combustibles compró a PSG y nombró a Al-Khelaifi como presidente del club parisino. BeIN también adquirió una amplia gama de derechos televisivos, incluyendo la Liga de Campeones y de partidos de selecciones nacionales.
Valcke fue el secretario general de la FIFA bajo la presidencia de Joseph Blatter desde 2007 y hasta su despido en enero de 2016.
La FIFA dijo el jueves que “respalda por completo” las investigaciones en Suiza y otros países. (D)