El Consejo de Participación Ciudadana (transitorio) ha decidido, por unanimidad, cesar al Consejo de la Judicatura, después de una sesión que empezó a las 10h00 y en las que se determinó que no reunía el requisito de legitimidad, porque no era independiente del gobierno del Presidente Rafael Correa, y haber influido en la designación de jueces.
En la evaluación de la situación del organismo judicial, el CPCCS-t, indicó que existían discrepancias sobre la legitimidad de los cargos de los vocales de la Judicatura, ya que ese órgano de designación de jueces «fue integrado, en su mayoría por exfuncionarios del Gobierno de ese entonces», según señaló en su cuenta de Twitter.
Gustavo Jalk, presidente del Consejo de la Judicatura; Néstor Ardito, Tania Arias, Ana Karina Peralta y Alejandro Subía, habían ocupado sus cargos y tenían lasos de amistad con el Ejecutivo de Correa, señaló el Cpccs-t.
Jalkh había sido Secretario del Presidente Rafael Corrrea, antes de que este impulsara su designación como Presidente de la Judicatura. Néstor Ardito había sido ministro de Justicia del gabinete de mismo gobierno. Tania Arias fue presidenta del Tribunal Contencioso Electoral, nombrada por la Constituyente de mayoría gobiernista. Ana Karina Peralta había trabajado antes con Jalkh en el Ministerio de Justicia, y con Fernando Alvarado en la SECOM. Alejandro Subía era asesor de la Presidencia de la República.
En los alrededores del teatro se han apostado grupos ciudadanos que corean apoyos al presidente del CPCCS, Julio César Trujillo.