El portal WikiLeaks expresó este martes su satisfacción por la decisión de la Fiscalía sueca de cerrar la investigación preliminar por violación contra su fundador, Julian Assange, y pidió centrarse en la actual extradición del periodista a Estados Unidos.
La fiscal superior sueca, Eva-Marie Persson, justificó este martes el cierre de las pesquisas contra Assange por el debilitamiento de las pruebas y la falta de argumentos para la acusación.
Tras conocerse la resolución, el director de WikiLeaks, el islandés Kristinn Hrafnsson, valoró la medida y pidió centrar ahora todos los esfuerzos en la actual «amenaza» contra el activista australiano: «el proceso beligerante de Estados Unidos»».
Assange está detenido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh (sur de Londres), mientras avanza su proceso de extradición a Estados Unidos, donde se le requiere por la filtración de miles de documentos confidenciales que aireó su portal WikiLeaks y le acusa, entre otros delitos, de «conspiración» para introducirse en sistemas informáticos gubernamentales.
El comienzo del juicio de extradición de Assange a EE.UU. está previsto para febrero del año próximo en la Corte de Magistrados de Westminster, en la capital británica.
El periodista, que siempre se declaró inocente, estuvo asilado en la embajada de Ecuador en Londres desde 2012 y hasta el pasado abril, cuando fue detenido por la Policía británica una vez que el Gobierno de Quito le retiró el estatuto de refugiado.
Assange, de 49 años, se refugió en la legación ecuatoriana para evitar ser extraditado a Suecia, que le requería por delitos sexuales, pero, tras la decisión hoy de la fiscalía de ese país, le queda solo el proceso estadounidense.
Un portavoz de su equipo legal recordó hoy que desde el primer momento Assange manifestó su inquietud de que, al margen del proceso sueco, hubiese una petición de extradición de Estados Unidos.
«Ahora que EE.UU. busca la extradición de Assange para afrontar unos cargos sin precedentes por su trabajo periodístico, sigue siendo una cuestión de gran pesar que esta realidad (por el proceso sueco) nunca fuese adecuadamente reconocida», añadió.
La fiscal sueca había ordenado en mayo reabrir el caso (iniciado en 2010 y cerrado en 2017), después de que Assange fuera arrestado en la embajada de Ecuador en Londres tras retirarle Quito el asilo.
El pasado junio, el exministro de Interior y actual titular de Economía británico, Sajid Javid, firmó una orden para permitir que Assange sea entregado a Washington, que le reclama por cargos que pueden suponer una condena de hasta 170 años de prisión. EFE