El Kremlin desmintió este miércoles que el Ejército sirio haya atacado a civiles en la provincia de Idlib, el último bastión de las facciones islamistas opositoras a Damasco, y afirmó que los bombardeos que se efectúan en la zona tienen como blanco a los terroristas.
«En lo que respecta a los ataques en Idlib que realizan los militares sirios, estos están dirigidos contra terroristas y no contra la población civil», dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Previamente, el Kremlin informó de una conversación telefónica entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, para tratar la escalada de las tensiones en Idlib, donde varios soldados turcos murieron en los últimos días a consecuencia de unos bombardeos sirios.
Durante un discurso en Ankara, Erdogan prometió atacar a las fuerzas leales a Bachar al Asad «en todas partes» en Siria si vuelven a agredir a tropas turcas en Idlib y acusó a Rusia e Irán, que apoyan al Ejército sirio, de llevar a cabo «masacres» en la región.
Según Ankara, catorce soldados turcos han muerto en la última semana en bombardeos del Ejército sirio en Idlib, donde Turquía mantiene una docena de puestos de observación militar.
El representante del Kremlin señaló este miércoles que Turquía sigue sin cumplir algunos de sus compromisos que asumió en la ciudad rusa de Sochi (mar Negro) en 2018 para solucionar el problema de Idlib.
En cambio, Rusia sí mantiene su compromiso con esos acuerdos, aseguró Peskov.
Agregó que Turquía, que se había comprometido a «neutralizar» a los grupos terroristas «que se concentran en Idlib» no llegó a cumplir ese cometido lo que demuestran los ataques de los insurgentes contra las tropas sirias y sus «acciones agresivas contra objetos militares» rusos. EFE