Manila, ).- Filipinas celebrará mañana el Día de Todos Santos, donde alrededor de 15 millones de personas pasarán por el cementerio para velar por sus muertos tras dos años de prohibiciones por la pandemia, al tiempo que Halloween también gana adeptos en el país.
La peregrinación a los camposantos estará fuertemente vigilada por un amplio despliegue policial con más de 192.000 agentes de guardia que custodiarán los 4.768 cementerios públicos, en uno de los días más simbólicos en el calendario festivo del país, indicó este lunes la Policía Nacional en un comunicado.
Los filipinos celebran «Undas», como se conoce a esta celebración en este país de mayoría católica, en un ambiente festivo y florido, donde los ciudadanos cantan, se hacen «selfies» y dejan velas en los panteones y tumbas de sus allegados, lejos de la solemnidad con la que el Día de Todos los Santos se vive en otros países.
«La pandemia nos ha forzado a entendernos con la muerte (…) nos ha enseñado a contar nuestros días y a valorar nuestro tiempo en la tierra», dijo el presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., en una rueda de prensa con medios locales en la que animó a los filipinos a visitar los cementerios.
Marcos Jr. declaró el lunes 31 de octubre día festivo en todo el país, por lo que los filipinos disfrutan en un largo puente vacacional hasta el martes.
Sin embargo, este fin de semana miles de personas se vieron atrapadas en las ciudades tras las lluvias torrenciales provocadas por el paso de la tormenta tropical Nalgae, que ha dejado al menos 98 muertos, la mayoría en la isla sureña de Mindanao, por avalanchas de tierra y graves inundaciones en todo el archipiélago.
HALLOWEEN EN FILIPINAS
Simultáneamente, y como reflejo del mestizaje cultural de la sociedad filipina tras siglos de colonizaciones foráneas, Halloween, la fiesta pagana de tradición anglosajona, también se celebra este lunes en el archipiélago.
Tiendas, centros comerciales y locales de toda índole están desde hace varios días repletos de juguetes, telas de araña y caretas de monstruos conmemorando Halloween, mientras los supermercados se apresuran a vender calabazas de gran tamaño.
Este Halloween hay numerosas fiestas y reuniones programadas en locales de ocio, mientras los niños tocarán la puerta de sus vecinos en busca de caramelos. EFE
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