La NASA envió este lunes a la Estación Espacial Internacional (EEI) una cápsula de carga Dragon de la compañía SpaceX, que despegó desde Florida (EE.UU.) tras dos tentativas previstas para el fin de semana y que debieron aplazarse por malas condiciones meteorológicas.
Un cohete Falcon 9 con la Dragon en su cúspide despegó sin incidentes desde una plataforma del Centro Espacial Kennedy a las 11.47 hora local (15.47 GMT), dando inicio a la misión de abastecimiento número 28 a la EEI que realizan la agencia espacial estadounidense y la firma de Elon Musk.
Como es habitual en los lanzamientos de SpaceX, nueve minutos después del despegue desde Cabo Cañaveral la primera etapa del cohete reutilizable Falcon 9 de nueve motores Merlín aterrizó con éxito en una plataforma en el Océano Atlántico, completando la recuperación número 198 que efectúa la compañía, de las cuales 155 han sido en el mar.
El de hoy ha sido el quinto viaje de esta etapa del Falcon 9 y el cuarto de la nave Dragon.
La segunda etapa del cohete se separó de la Dragon poco más de 12 minutos después del lanzamiento y de esta forma la cápsula continuó por su cuenta el trayecto hasta la EEI, al que llegará el martes a las 5.50 hora local del este de EE.UU. (9.50 GMT) para luego acoplarse de forma autónoma al módulo Harmony de la estación y donde permanecerá unas 3 semanas, informó la NASA.
La Dragon viaja sin tripulación y con más de 3.100 kilogramos en su interior de material científico, suministros para la tripulación de la EEI y equipamientos, entre los que figuran dos nuevos paneles solares que servirán para incrementar la energía del laboratorio orbital en un 30 %.
Rumbo a la estación espacial va también comida para la tripulación del laboratorio orbital, a base de manzanas, arándanos, vegetales y queso, además de 586 libras de equipo científico que servirán para investigar, entre otros, cómo limitar el estrés de las plantas en el espacio y cómo se adaptan a un entorno de microgravedad.
La nave transporta también material para un proyecto desarrollado por universidades de Canadá y Australia que investiga regiones del Ártico canadiense, y que podría proporcionar una mejor comprensión de los efectos sobre el clima de la Tierra.
Como se pudo ver en la transmisión de la NASA, la nave lleva en su «maletero» los nuevos paneles solares, el quinto y sexto, cada uno de ellos de 18,2 metros de largo por 6 metros de ancho, además de pesar 340,5 kilos.
Los astronautas de la NASA y miembros de la Expedición 69 a bordo de la EEI Steve Bowen y Woody Hoburg serán los encargados de efectuar dos complejas caminatas espaciales los próximos 9 y 15 de junio, cada una de casi siete horas, para instalar los nuevos paneles solares de la estación espacial.
La misión de hoy, que logró despegar al tercer intento tras los aplazamientos del sábado y domingo pasado, es la número 38 que efectúa en este 2023 SpaceX y el cuarto viaje de una Dragon a la EEI en ese mismo periodo. EFE