El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió este miércoles en que la ONU debe asumir «toda su responsabilidad» respecto al conflicto en Ucrania y lamentó que eso no suceda porque «los miembros permanentes» del Consejo de Seguridad «son los que fomentan las guerras».
En su primera rueda de prensa con corresponsales extranjeros desde que asumió el poder el pasado 1 de enero, Lula comentó sus esfuerzos para intentar llevar a Ucrania y Rusia a una negociación y afirmó que «es necesario parar esa guerra», pues «cuanto más el mundo precisa de paz, menos paz es lo que tiene».
En ese sentido, afirmó que «lo primero» que Brasil «está haciendo es no participar de esa guerra», que en su opinión ha vuelto a poner de relieve que el mundo «necesita una nueva gobernanza» global.
El conflicto desatado por la invasión rusa a Ucrania «tenía que ser discutido en las Naciones Unidas», pero «son los miembros del Consejo de Seguridad los que hacen la guerra» y los que «creen que la guerra va a acabar solamente cuando una de las partes se imponga» a la otra por la vía militar, sostuvo.
Lula admitió que una «propuesta de paz sólo podrá ser discutida cuando los dos países (en conflicto) quieran», pero insistió en que los líderes mundiales deben trabajar para generar esa situación, en vez de «alimentar» la guerra.
El presidente brasileño consideró «impresionante la inmovilidad de la ONU» frente a la guerra en Ucrania y a la creciente tensión en Israel y Oriente Medio, que también ahora amenaza con desatar nuevos conflictos de alcance global.
Según Lula, los líderes mundiales tienen la «obligación» de «buscar la forma de parar todas las guerras», que tienen efectos devastadores «para la economía», un altísimo coste humano y agravan las «inmensas» e «indignantes» desigualdades que existen en el planeta.
«Hoy casi todos (los países) están invirtiendo en armas» que acentúan los conflictos y «no sabemos cuánto están invirtiendo para acabar con el hambre y la miseria en el mundo», declaró. EFE (I)