El candidato oficial a la Presidencia de la República, Lenín Moreno, ha ofrecido este jueves en Ambato que destinará más de US$ 500 millones para erradicar el desempleo entre los jóvenes, a través de la creación de puestos de empleo «vía la utilización del anticipo del Impuesto a la Renta y un fondo para la entrega de créditos preferenciales para emprendimientos productivos». Moreno insistió que «cualquier reforma impositiva deberá preservar la dolarización, el empleo y la estabilidad fiscal».
Moreno, que recorrió Tungurahua y Cotopaxi, subrayó que sus principales preocupaciones serán mantener «las conquistas sociales» y la creación masiva de empleo. Dijo que destinarán US$ 241 millones anuales correspondientes al anticipo del Impuesto a la Renta (IR) para impulsar, por parte de las empresas, la generación de puestos de empleo para la población joven.
Con este conjunto de medidas, a las que sumará la construcción masiva de vivienda y el impulso de otras áreas estratégicas, como la agroindustria, insistió que se erradicará el desempleo entre el segmento de la población joven de entre 18 y 30 años: “El anticipo del Impuesto a la Renta será reconducido, será eliminado como tal y será reconducido para permitir a las empresas contratar a jóvenes. Nosotros esperamos que no menos de 75.000 jóvenes sean contratados con este mecanismo”, dijo Moreno.
Lenín Moreno declaró además que abrirá una línea crédito estatal preferencial por US$ 300 millones para dotar de los recursos a emprendimientos concebidos por jóvenes. Los fondos, que se prevé se distribuyan en 20.000 créditos de US$ 15.000, servirán como capital semilla para la constitución de las empresas o la ampliación de sus operaciones.
“La única garantía que les exigiremos es que tengan una idea”, aseguró.
El desempleo se encuentra en el Ecuador en 5,2 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) a diciembre del 2016, según datos oficiales.
Moreno dice estar abierto a incluir en la agenda del diálogo la revisión del esquema impositivo, especialmente en lo referente a la necesidad de aplicar una racionalización y posterior moratoria normativa para facilitar el pago de impuestos pero advirtió que “no podemos echar a la basura este mecanismo de solidaridad”.
En lo referente al pedido de los empresarios de desmontar el Impuesto a la Salida de Divisas (ISD), que grava la transferencia, envío o traslado de divisas que se efectúan al exterior, sea en efectivo o través del giro de cheques, transferencias, retiros o pagos de cualquiera naturaleza con una tasa de 5 por ciento, Moreno dijo que se encontraba abierto a escuchar los argumentos del sector privado y a valorarlos a la luz de la necesidad de preservar la dolarización y la estabilidad de las cuentas fiscales.