
Dayuma, la puerta abierta
Miguel Ángel Cabodevilla
Pamplona, España
Dayuma, murió al comienzo de marzo. Desde lejos, he visto las fotografías de su desolado entierro en Toñampari. He sentido una gran tristeza. Ecuador, todo el país, al no darse por enterado de esta muerte y su significado, ha perdido una nueva ocasión de reconocerse a sí mismo, de ser justo con su historia y parte de sus orígenes. Dayuma era una gran señora, una mujer inteligente, la última de una estirpe irrepetible. No mereció despedirse de incógnito, sin una muestra oficial de respeto y veneración.