El secretario de Transporte de Argentina, Juan Pablo Schiavi, afirmó que es una «incógnita» cómo se produjo el accidente ferroviario registrado hoy en Buenos Aires, en el que murieron 49 personas y otras 600 resultaron heridas.
«El tren ingresó (a la estación) a una velocidad habitual. Ahí está la parte del accidente, la incógnita o la responsabilidad. No sabemos qué ocurrió en los últimos 40 metros. El conductor estaba en su puesto y el tren no paró«, dijo el funcionario en rueda de prensa.
La tragedia se registró a las 08h32 hora local (11h32 GMT) cuando un tren que procedía de la localidad bonaerense Moreno se incrustó en una de las cabeceras de la terminal ferroviaria de Once, una de las más populosas de la capital argentina.
«A mil metros de dónde ocurrió el accidente, el tren pasó de 47 a 39 kilómetros por hora, con lo cual venía frenando. A 300 metros de los parachoques ya estaba a 27 kilómetros por hora y entra a la punta del andén a 26 kilómetros por hora. A 40 metros de los parachoques estaba a 20 kilómetros por hora», precisó Schiavi.
El secretario de Transporte expresó las condolencias del Gobierno de Cristina Fernández a las familias de los fallecidos en el accidente y el ruego por la recuperación de los heridos.
«Hay tres palabras que se nos pasan por la cabeza: la tragedia, la desgracia y el día luctuoso. Queremos agregar de nuestra parte la búsqueda de la responsabilidad y analizar por qué también existe la palabra accidente», dijo Schiavi.
El funcionario señaló que el conductor del tren, ingresado en una unidad de terapia intensiva, tiene 28 años, antecedentes «muy buenos» en su hoja de servicios y estaba «descansado» al momento de lo que calificó como una «tragedia horrible».
El conductor abordó el tren en una de las estaciones intermedias, la de Castelar, y éste era su primer viaje del día.
«Este tren paró catorce veces y la última vez no paró», señaló Schiavi, quien precisó que habitualmente este servicio transporta a unas 1.500 personas por viaje.
La formación tenía ocho vagones con capacidad para llevar 250 personas en cada uno, pero Schiavi dijo que los dos primeros vagones estaban «abarrotados de gente» que usualmente se sube allí para ganar tiempo, lo cual produjo que el accidente «tomara el ribete de una tragedia de muchísima gravedad».
El funcionario indicó que el Estado hará una investigación técnica y administrativa «muy profunda» sobre lo ocurrido y aportará al juez del caso, Claudio Bonadío, los registros de grabación de voz de la cabina del conductor, de la cámara de video que llevaba la locomotora y de otras cámaras de la estación de Once.
Confirmó que son 49 las personas fallecidas y que, de total de heridos, 461 permanecen ingresados en diferentes hospitales de la capital argentina. EFE
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