El papa León XIV pidió este jueves que se dé espacio al diálogo para conseguir el bien común en América Latina, durante su primer mensaje de Navidad antes de la bendición ‘Urbi et Orbi‘ asomado al balcón de la fachada de la basílica de San Pedro.
«Que el Niño Jesús inspire a quienes tienen responsabilidades políticas en América Latina para que, al enfrentar los numerosos desafíos, se le dé espacio al diálogo por el bien común y no a las exclusiones ideológicas y partidistas», dijo el papa en su mensaje.
Tras celebrar la misa de Navidad, León XIV se asomó a la logia central de la fachada de San Pedro, donde el 8 de mayo se presentó como nuevo pontífice, para la tradicional bendición ‘Urbi et Orbi’ ante miles de fieles que acudieron a pesar de la intensa lluvia.
Al igual que hizo Francisco durante su pontificado, León XIV repasó en su mensaje de Navidad los conflictos y los problemas en el mundo y pidió la paz para Oriente Medio, Ucrania y otros países golpeados por la guerra.
«Si cada uno de nosotros, a todos los niveles, en lugar de acusar a los demás, reconociera ante todo sus propias faltas y pidiera perdón a Dios, y al mismo tiempo se pusiera en el lugar de quienes sufren, fuera solidario con los más débiles y oprimidos, entonces el mundo cambiaría», comenzó su discurso.
Refugiados y migrantes
Y en este día en el que los católicos celebran el nacimiento de Dios, aseguró que «Jesús asume sobre sí nuestra fragilidad, se identifica con cada uno de nosotros» y mencionó «los numerosos refugiados y migrantes que cruzan el Mediterráneo o recorren el continente americano».
«En este día santo, abramos nuestro corazón a los hermanos y hermanas que están necesitados y sufren. Al hacerlo, lo abrimos al Niño Jesús que, con sus brazos abiertos, nos acoge y nos revela su divinidad», añadió. EFE (I)


