Allanan la casa de Cléver Jiménez

Elementos de la policía allanaron la tarde del viernes la casa en Quito del asambleísta de Pachakutik Cléver Jiménez, por orden del juez  Jorge Bluma petición de la Fiscal subrogante, Cecilia Armas. La noche anterior, fue allanada la oficina del legislador en el Palacio Legislativo, para lo cual se ha contado con la autorización de la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, según reporta El Universo.

Cuatro policías del Grupo de Intervención y Rescate (GIR), tres de criminalística, el fiscal de Pichincha José Luis Jaramillo y algunos ayudantes de la Fiscalía entraron a la casa que el asambleísta alquila en el sector de La Floresta, centro oriente de Quito. Jiménez se encuentra fuera de Quito desde la semana pasada.

Tras dos horas de revisión del domicilio, el fiscal se llevó 257 hojas, en copias simples y de trabajo, incluida “una proforma que decía escanear redes”, indicó Julio César Sarango, abogado de Jiménez, citado por El  Universo.

Jiménez es objeto de una indagación fiscal por presunto espionaje al Presidente Rafael Correa, según reveló el portal del diario oficial El Telégrafo, citando al Fiscal General Galo Chiriboga.

En noviembre pasado, el Fiscal General informó que se recibió la denuncia contra el legislador y que se habían ordenado algunas pericias judiciales.

“El señor Jiménez está reconociendo que ha espiado o que si no es él el que directamente espió, es partícipe de ese espionaje, cuyo resultado lo tiene él. Este caso, sin duda, tiene referencia a la campaña que Ecuador está haciendo por el tema Chevron, por lo tanto se ve que estas personas que accedieron a los correos del Presidente y del Vicepresidente están, al parecer, vinculadas con el caso Chevron”, dijo entonces Chiriboga.

Los correos electrónicos del presidente y el vicepresidente fueron presentados por  Chevron en el proceso que inició en Nueva York por presuntas irregularidades en el millonario juicio que perdió en Ecuador por daños ambientales. El juez norteamericano, sin embargo, consideró que la información no era relevante y la desestimó antes de que pudiera ser revelada.

Pero Jiménez se convirtió en sospechoso de espionaje porque reveló parte de esas comunicaciones internas y acusó a la Procuraduría de contratar el bufete de abogados Foley Hoag pese a que la firma había trabajado para Chevron. También reveló que algunos funcionarios del actual Gobierno fueron los que libraron de responsabilidad ambiental a Texaco-Chevron, cuando trabajaban en el Gobierno de Jamil Mahuad.

El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, instó a Jiménez a revelar quién le había entregado los mensajes interceptados al Gobierno y pidió a la Fiscalía que iniciara un proceso penal en contra del asambleísta. El pedido se hizo durante una de las cadenas nacionales que emite el Gobierno para informar de sus actividades, el pasado 9 de noviembre.

Días antes, Jiménez describió las acusaciones de espionaje de «ridículas».

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Foto tuiteada por @radiosonorama

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