Beirut, 25 sep (EFE).- De esas víctimas, doce eran extremistas suníes y ocho milicianos kurdos, que perdieron la vida en los combates que se desarrollaron desde el amanecer del miércoles hasta anoche.
Entretanto, las hostilidades prosiguen hoy en la periferia sur de Kobani, uno de los principales enclaves kurdos de Siria, donde los yihadistas se han visto obligados a retroceder y se encuentran ahora a diez kilómetros de la ciudad, tras haberse aproximado a siete.
Los radicales han continuado con su ofensiva para tomar el control de Kobani, iniciada el pasado día 16, pese a que ayer algunas de sus posiciones en los alrededores de esta población fueron bombardeadas por los aviones de la coalición internacional, liderada por Estados Unidos.
Mientras, el EI también se enfrenta a las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo en las áreas de Mabruka, Rauia, Dahma y Zamad, en la provincia de Al Hasaka, donde al menos veinte milicianos kurdos y dieciséis radicales han perdido la vida en los tres últimos días.
El EI proclamó un califato en Irak y Siria a finales de junio, donde ha conquistado amplias zonas de territorio.
El lunes por la noche, Estados Unidos anunció el comienzo de los ataques aéreos contra los yihadistas en Siria. EFE