WASHINGTON (AP) — Grecia comunicó el domingo al Fondo Monetario Internacional que reembolsará un préstamo por 450 millones de euros que vence el jueves, dijo el ministro de finanzas del país, Yanis Varoufakis.
El funcionario y la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, se reunieron en Washington para una «conversación informal» sobre el programa de reformas de Grecia, un país agobiado por una abultada deuda, dijo el FMI en un comunicado.
El gobierno griego anunció que Varoufakis se reunirá el lunes con funcionarios del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Grecia sostiene difíciles negociaciones con sus acreedores en torno al programa de rescate financiero, en una situación que ha demorado el desembolso del último préstamo restante de 7.200 millones de euros (7.900 millones de dólares) para el país.
Ante la falta de estos recursos, el gobierno de Grecia afronta una crisis de liquidez y tendría que echar mano de sus reservas.
Atenas confía en recibir al menos una parte del último desembolso del rescate para evitar el impago de su deuda y para cubrir salarios y pensiones.
«Ambos acordamos que la cooperación efectiva conviene a todos», declaró Lagarde en un comunicado. «Pusimos énfasis en que la continuidad de la incertidumbre no es lo conveniente para Grecia».
Grecia debe reembolsar el jueves un préstamo por 450 millones de dólares al FMI. El viceministro de finanzas, Dmitris Mardas, dijo el sábado al canal televisivo Mega que el país tiene los recursos pero corresponde al gobierno decidir si hará el pago.
Grecia y sus acreedores sostienen negociaciones sobre las reformas que Atenas debe poner en marcha para recibir los nuevos fondos.
Lagarde dijo que las conversaciones se reanudarán el lunes «sin demora» entre los equipos técnicos y las autoridades tanto en Atenas como en Bruselas.
Desde 2010, la viabilidad financiera de Grecia ha dependido de los créditos de rescate por 240.000 millones de euros que le han concedido otros países socios de la zona euro y el FMI.
El primer ministro Alexis Tsipras fue elegido en enero ante su compromiso de que cancelaría las difíciles condiciones impuestas a cambio del rescate financiero, incluyendo las profundas reducciones al gasto y el alza de impuestos que han suscitado rechazo en el país.
Sin embargo, el nuevo gobierno del partido Syriza se ha apartado un poco de muchas de sus promesas previas a las elecciones.