«Baby», un drama sobre niños abandonados en China compite en San Sebastián

El director chino Liu Jie presentó en San Sebastián «Baby«, un filme que aborda el drama de los niños que son abandonados en su país por nacer con enfermedades o defectos físicos, «un fenómeno» que afecta 100.000 menores cada año, según explicó el cineasta en rueda de prensa.

Una película que compite por la Concha de Oro del festival y que Liu Jie realizó para tratar de entender este problema, agudizado además por el hecho de que los padres pueden decidir sobre si esos bebés viven o mueren.

Para abordar este tema, creó el personaje de Jiang Meng, una joven de 18 años a la que sus padres apartaron de su lado tras nacer con una enfermedad congénita y que ahora convierte en una auténtica misión el salvar a una bebé que ha nacido con el mismo problema y a la que su progenitor quiere dejar morir.

El realizador chino aseguró que llevaba muchos años pensando en los motivos de estos abandonos a raíz del caso de un amigo al que, después de nacer su hijo enfermo, el médico dio tres días para decidir si quería salvarlo, opción por la que se inclinó finalmente.

Una vez acabado el largometraje, piensa que este es un asunto «muy complicado», que «no es responsabilidad de una persona simplemente» y sobre el que «no es fácil llegar a una conclusión».

«Ahora muchos padres tienen derecho a decidir la muerte de un niño gravemente enfermo porque puede ser un desastre para la familia. Por eso, el motivo de hacer la película es mostrar también esta realidad para que todo el mundo reflexione si está bien o no», precisó.

El gobierno chino ha resuelto en parte la situación con la acogida de los niños en familias que a cambio reciben dinero, ya que la adopción es muy difícil porque la tradición china establece que los padres cuidan a los hijos para que estos los cuiden luego a ellos, algo que se complica si los pequeños son discapacitados, señaló.

Para afrontar este proyecto se sirvió únicamente de un borrador de cinco páginas, pues desde hace dos años prefiere no preparar «un guion completo» porque tiene la sensación que los diálogos son frases dichas por él y no por los personajes.

Sus protagonistas, Yang Mi, actriz y cantante famosa en su país, y Guo Jingfei, actor procedente del teatro, tuvieron que trabajar sobre una historia que se iba construyendo día a día y para la que el director filmó «siete u ocho finales». EFE

(I)

Más relacionadas