Juan José Pons
Guayaquil, Ecuador
Se refiere semánticamente a la capacidad de ser gobernable y conceptualmente a la relación que se manifiesta cuando existe un estado de equilibrio en el ejercicio del poder político derivado de la solución de demandas sociales y la capacidad de los gobiernos de atender éstas de forma eficaz, estable y legítima. Gobernabilidad democrática.
El enfoque del PNUD se basa en un concepto simple: invertir en la gobernabilidad democrática es esencial para hacer que el desarrollo funcione. En los últimos años se le ha pedido al PNUD que dé su apoyo en áreas temáticas tales como la reforma de la administración pública, el Estado de derecho, la lucha contra la corrupción, la transparencia, el acceso a la justicia, la igualdad de género, la descentralización, la gobernabilidad local y el desarrollo local.
Objetivo
Tomando como principal referente a las prioridades nacionales, el PNUD se ha planteado el objetivo de fortalecer las capacidades nacionales y locales para la satisfacción de las expectativas de los ciudadanos respecto de la participación, desarrollo, estado de derecho y responsabilidad con sistemas más sólidos de gobernabilidad democrática.”
El texto que antecede es tomado del programa de gobernabilidad del PNUD . Este concepto que está tan claramente descrito requiere que TODA la sociedad civil ecuatoriana lo asuma como propio e identifique el rol que le toca jugar para lograr la gobernabilidad democrática que necesitamos para alcanzar los objetivos nacionales que demandamos.
Si debemos destacar la prioridad que tiene la lucha contra la corrupción, la transparencia, la independencia y el acceso a la justicia, concluimos que sin en ese marco institucional de seguridad jurídica no funciona la gobernabilidad.
La ciudadanía debe conocer la real situación del país que asume el nuevo gobierno. También debe conocer los desafíos que implican a todos los ecuatorianos el entrar a la vía de desarrollo económico con justicia social que se requieren para cumplir con las metas planteadas en el plan del Nuevo gobierno.
La responsabilidad para cumplir esas metas es de todos los ecuatorianos representados en el ejecutivo, la Asamblea Nacional, en los gobiernos seccionales, en las organizaciones sociales, gremios de la producción, etc. Debemos llegar a acuerdos mínimos de gobernabilidad que prioricen el bien común y no las agendas individuales y todo eso en una marco de absoluta honestidad y transparencia .
El primer paso está en la estructuración de la nueva Asamblea cuyas designaciones deben darse a partir de una agenda legislativa que transparente y contribuya al logro de los intereses de los ecuatorianos.
