El Gobierno ecuatoriano comunicó este martes que sigue abierto al diálogo con la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), con cuyos representantes asegura haber alcanzado 11 puntos de acuerdo y cinco discrepancias.
«Esperábamos una propuesta para continuar en el diálogo», manifestó en una rueda de prensa la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, al asegurar que el encuentro celebrado el lunes con el liderazgo indígena se desarrolló en un «contexto de cordialidad».
Vela expresó también su «sorpresa» al escuchar las declaraciones del presidente de la Conaie, Leonidas Iza, al término de la reunión, en las que dijo no estar de acuerdo con las explicaciones del Gobierno y valoró convocar una movilización a escala nacional.
GOBIERNO ESPERA MESAS DE DIÁLOGO
La ministra, por su parte, reveló que una vez concluidas las conversaciones, que se extendieron durante más de tres horas, ambas partes acordaron establecer mesas de negociación, «para poder determinar cuáles eran los voceros de las comunidades indígenas que deberían integrarse a las mesas técnicas de diálogo que se habían acordado».
Esas mesas, precisó, debían instalarse a partir de este martes, si bien asumió que los propios mecanismos de consulta interna a las bases que forman parte de la estructura organizativa de las nacionalidades indígenas podrían demorar más tiempo.
Con todo, sostuvo que el Ejecutivo sigue abierto al diálogo y esperará su reanudación siempre y cuando se produzca en un tiempo prudencial.
Detalló asimismo los puntos en los que se llegó a un acuerdo en la negociación, como por ejemplo, en el origen de la crisis económica «heredada» de anteriores Gobiernos y las razones por las que «el país tiene una deuda estatal tan alta, de 63.000 millones de dólares».
La titular de la Cartera de Gobierno aclaró que las partes estuvieron de acuerdo en «la necesidad de despetrolarizar la economía» para que el modelo de desarrollo camine hacia una propuesta con menor énfasis en la extracción de petróleo y minería.
Otro de los puntos de coincidencia fue el establecimiento de un mecanismo de otorgamiento de créditos para impulsar el trabajo de los pequeños y medianos agricultores, con una tasa de interés del 1 % antes de enero del año 2022.
También en estimular la creación de empleos, específicamente dentro del sector agropecuario, la incorporación de la medicina tradicional indígena al sistema global; el fortalecimiento de la justicia indígena; y el establecimiento claro de sus competencias.
En paralelo, hubo acuerdos en la necesidad de profundizar el proceso de educación bilingüe pluricultural, además de garantizar la consulta previa, libre e informada a las comunidades indígenas.
Vela señaló que Gobierno y Conaie acordaron que «los procesos de privatización no son una propuesta incluida en el Plan Nacional de Desarrollo», salvo la que atañe al Banco del Pacífico, con el objetivo de crear un fideicomiso dirigido a financiar la lucha contra la desnutrición infantil, programa prioritario del Ejecutivo.
Las partes afirmaron su compromiso en recurrir a la cooperación internacional a fin de lograr una transición ecológica; la revisión de indultos planteados anteriormente al Parlamento, que según la ministra, serán analizados «caso por caso»; y revisar la razón que lleva al incremento de precios de insumos agropecuarios indispensables para los procesos productivos de las comunidades.
DISCREPANCIA SOBRE COMBUSTIBLES
Respecto a los puntos donde no fue posible el acuerdo, la representantes del Gobierno insistió en que se establecieron mesas técnicas con el objeto de seguir abordando esas cuestiones.
Según enumeró, las discrepancias versaron sobre la solicitud de congelamiento de los precios de los combustibles, el mecanismo para enfrentar problemas de la extracción minera, la moratoria de créditos por un año, y el pago a los Gobiernos Autónomos Descentralizados y al Instituto Ecuatoriano de la Seguridad Social.
El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, junto a varios de sus colaboradores, se reunió el lunes con las máximos dirigentes de la Conaie en el Palacio de Gobierno, para intentar saldar discrepancias sobre las salidas a la crisis económica que afronta el país.
Al concluir la reunión Iza afirmó que no había «apertura del presidente de la República», a temas importantes como la congelación del precio de los carburantes, que se vienen encareciendo desde hace dos años, en relación a cuando eran subvencionados por el Estado.
La Conaie protagonizó en octubre de 2019 una dura protesta contra una media adoptada por el Gobierno del expresidente Lenín Moreno, que tuvo que derogar en aras de pacificar las manifestaciones en las que murieron a menos seis personas y 1.500 resultaron heridas.