La delegación del Gobierno colombiano viajó este sábado a Caracas para participar en el cuarto ciclo de conversaciones de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que arrancará el lunes.
«Este cuarto ciclo (…) va a ser, sin lugar a dudas, un nuevo desarrollo, especialmente en los temas de participación y cese al fuego. Esperamos volver al país con nuevos acuerdos que desarrollen este importante proceso de paz», dijo el senador Iván Cepeda, parte del equipo negociador del Gobierno.
Las conversaciones con el ELN se retomaron el pasado 21 de noviembre después de cuatro años paralizados con el anterior Gobierno, de Iván Duque (2018-2022), y el próximo 14 de agosto en Caracas comenzará la cuarta ronda, aunque las conversaciones se han tornado permanentes en algunos puntos.
El Gobierno del presidente Gustavo Petro sabe que va contrarreloj y que necesita dejarlo todo amarrado de cara al futuro, por lo que el jefe negociador, Otty Patiño, enfatizó el 3 de agosto en que no se levantarán de la mesa «hasta conseguir el fin del conflicto armado».
«Vamos a combinar celeridad y rigurosidad para alcanzar el acuerdo final», prometió Patiño, quien les dijo a sus compañeros en la mesa: «Hagámosle con prisa», aludiendo a hacerlo por las víctimas y la «gente que está sufriendo».
El propio Petro se atrevió a ponerle fecha de fin al conflicto con el ELN el pasado 9 de junio en el cierre del ciclo de conversaciones en La Habana cuando dijo: «En mayo de 2025 cesa definitivamente la guerra de décadas entre ELN y el Estado».
El pasado 3 de agosto, el Gobierno y el ELN también dieron dos pasos fundamentales hacia la paz: el comienzo del cese al fuego bilateral de 180 días y la instalación de un Comité Nacional de Participación (CNP) para integrar a la sociedad civil en los diálogos. EFE (I)