Los ministros de Hacienda de los 17 países de la eurozona analizarán en las próximas horas un potencial plan de rescate de España, dijo un funcionario de la eurozona, al aumentar la presión para que Madrid solucione su precaria situación, especialmente la del sector bancario.
El último informe — del Fondo Monetario Internacional — calcula que España necesitará por lo menos 40.000 millones de euros (50.000 millones de dólares) en nuevo capital tras la prueba de estrés a la que fue sometido el sector bancario español. El informe fue difundido a primeras horas del sábado, antes de que los ministros de Hacienda hablen por teleconferencia a las 1400 GMT.
La vicepresidenta primera del gobierno Soraya Sáenz de Santamaría dijo el viernes que el gobierno aguardará los resultados de tres auditorías, incluyendo la del FMI, y dos de firmas de contabilidad privadas, antes de tomar decisiones. Empero, aumenta la presión y el gobierno parece haberse resignado al hecho de que necesita un rescate de sus socios europeos para apuntalar el acosado sector bancario ante lo limitado de sus recursos.
Un vocero del primer ministro de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker, que presidirá la reunión de ministros de Hacienda, dijo que analizarán la situación.
El portavoz Guy Schuller agregó que España no ha solicitado aún ayuda alguna, «pero queremos estar preparados por su se produce el pedido».
Los funcionarios del Ministerio de Economía español no devolvieron las llamadas telefónicas efectuadas en busca de comentarios.
Si pide un rescate, España será el cuarto país que lo hace — tras Grecia, Irlanda y Portugal — desde que estalló la crisis de la deuda soberana hace dos años. Empero, los primeros tres países socorridos son pequeños y muchos temen que el rescate de España. la cuarta economía de Europa, pueda poner en peligro la totalidad del sistema del euro.
Las autoridades europeas s
e debaten entre dar a España fondos suficientes para hacer el rescate creíble, de producirse, y evitar la quiebra de la totalidad del sistema.
El viernes, Sáenz de Santamaría se negó a indicar una suma que sería necesaria ante el estallido de la burbuja del ladrillo, aunque los cálculos de rescatar al sector bancario oscilan entre 40.000 millones de euros (49.870 millones de dólares) y 100.000 millones de euros.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=8W8xNqtSM-A[/youtube]