El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, pidió este jueves apoyo a los jueces y anunció medidas para mejorar la tecnología y las condiciones de los presos, para hacer frente a la crisis de seguridad que atraviesan varias cárceles del país.
En un comunicado, la Secretaría General de la Comunicación de la Presidencia, precisó que el mandatario hizo el anuncio en una reunión de seguridad en la ciudad costera de Guayaquil, en la que se analizó la situación en las penitenciarías, también conocidas como Centros de Rehabilitación Social.
Entre las medidas, Moreno apuntó que «el Ministerio del Interior solicitará al Consejo de la Judicatura, el apoyo de los jueces en la consecución de los objetos propuestos«.
Pidió además que las decisiones judiciales que se adopten, «no se interpongan o contradigan con las acciones disciplinarias», que rigen en el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores.
Moreno señaló que se garantizará la seguridad física de los presos gracias a «la actualización en tecnología que permita obtener información», así como «prever cualquier acto de violencia» que se dé en las cárceles.
También aseguró que se mejorará la alimentación de los internos y se procederá a una reclasificación, «de acuerdo a la peligrosidad y comportamiento, y a la causa de la sentencia o razón por la que se encuentran privados de la libertad».
La reunión de seguridad encabezada por Moreno se produjo después de que el pasado lunes un preso identificado como «El Cubano» muriera y un policía resultara herido en un motín en la Penitenciaría el Litoral, en Guayaquil.
Este episodio se sumó a otros sucesos violentos ocurridos en los últimos meses en varias cárceles de Ecuador, aquejadas por el hacinamiento y que ha dejado alrededor de una decena de muertos por agresiones entre los internos.
A raíz de esta situación el presidente decretó el estado de excepción «en el sistema de rehabilitación social a nivel nacional», durante sesenta días, para tratar de solucionar sus necesidades emergentes.
En paralelo, el Ejército desplegó a sus fuerzas en las áreas colindantes a los centros penitenciarios, que no obstante, no han impedido las reyertas. EFE