
AVC, guerrilla inconclusa (segunda parte)
Alberto Molina
Quito, Ecuador
En los testimonios de los miembros de AVC, con claridad señalan: que “en los ochenta se produjo en el Ecuador un intento subversivo, protagonizado por el grupo armado Alfaro Vive Carajo AVC”. Que el M19, grupo subversivo colombiano, “proporcionó armas y/o militantes para la ejecución de operativos militares”. Que el cabecilla del AVC, Arturo Jarrín tomó contacto con el líder del grupo subversivo colombiano M19, Jaime Batteman y le comprometió su apoyo, y que conjuntamente con estos subversivos extranjeros partipó de una “recuperación” (léase asalto) al Banco de Fomento. Que Jarrín y una veintena de alfaristas abandonaron el país para recibir entrenamiento militar en Libia”. Todavía hay más: