Opinión

Elegir entre Washington y los Castro

Por Jorge Castañeada
Ciudad de México, México

Hace 31 años Fidel Castro fue informado por el gobierno de México que no podría asistir a la Cumbre Norte-Sur por celebrarse en Cancún. El anfitrión y organizador del encuentro, el entonces presidente José López Portillo, se vio obligado a no requerir a quien había llamado “mi comandante”. Ronald Reagan, a la sazón presidente de Estados Unidos, fue muy claro: si iba Castro, no iría él. Y aunque Cuba presidía en aquella época el Movimiento de Países No Alineados, carecía de sentido una reunión sobre desarrollo económico en el mundo sin Estados Unidos. Cuando fue notificado Castro de esta mala noticia, hizo un berrinche monumental, pero al final del día no tuvo más remedio que aceptar.

[…]