Legisladores de oposición y sindicalistas protestan en las afueras de la Asamblea Nacional en contra de la aprobación de las enmiendas constitucionales impulsadas por el Gobierno, que incluyen la posibilidad de la reelección indefinida de autoridades. Durante la mañana, la movilización era encabezada por los legisladores de CREO, Andrés Páez, Patricio Donoso y César Monge. Durante la mañana, dirigentes de la CONAIE y sindicalistas han tomado la posta. En momentos ha habido violencia, en especial a lo largo de la avenida 10 de agosto en Quito. Cerca del mediodía una mujer ha sido llevada detenida mientras increpaba a la Policía. Fotografías muestran forcejeos y heridos.
Según ha reportado el Frente Popular, cuatro trabajadores han sido detenidos esta madrugada, en Santo Domingo de los Tsáchilas, por bloquear la carretera hacia Quito. La policía ha dispersado la protesta con gases lacrimógenos y ha capturado a cuatro de los manifestantes, entre ellos Dalton Tapia, presidente del Frente Unido de los Trabajadores en Santo Domingo.
Hasta el momento no existe confirmación oficial de ninguna de las detenciones.
Otro grupo de manifestantes, entre indígenas y sindicalistas, se congregaron en el parque El Arbolito, en el centro de Quito y próximo a la Asamblea Nacional, en una vigilia ante el segundo y definitivo debate del pleno legislativo de las enmiendas que inició jueves.
Otro grupo de oposición, en cambio, se reunió en la avenida Los Shyris, en el centro norte de la capital, y caminó hasta El Arbolito para apoyar la vigilia.
La Policía, por su parte, redobló la seguridad en las calles aledañas a la sede parlamentaria, ante el anuncio de varios dirigentes sindicales de que intentarán llegar hasta ese recinto para exigir que se «archiven» las enmiendas constitucionales.
El oficialismo, por su parte, ha explicado que el Tribunal Constitucional, el máximo organismo de control de la Carta Magna, le facultó para llevar adelante las enmiendas, las mismas que, según ese grupo pro-Gobierno y de mayoría en la Asamblea, ha «socializado» las reformas entre la población en el último año.
Ellos empezaron a llegar ayer en la tarde a las inmediaciones de la sede parlamentaria, donde algunos -sobre todo dirigentes de los sindicatos y grupos indígenas afines al Gobierno- pasaron la noche y esperan que se sumen otros simpatizantes en la mañana.
En el lugar donde se concentraron se armaron tiendas de campaña y una tarima, desde donde esta mañana harán sonar su apoyo al Gobierno, protegidos por el fuerte dispositivo policial que tiene como misión impedir que los opositores lleguen a ese sitio.
El Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor central obrera del país, y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), en la oposición, han asegurado que la protesta se extenderá de manera indefinida si el oficialismo aprueba las enmiendas.
José Villavicencio, de la Unión General de Trabajadores (UGT), también en la oposición, indicó que a la protesta se sumarán varias organizaciones sindicales y que desde la noche de este miércoles indígenas del norte y sur del país empezaron un peregrinaje a la capital.
Los dirigentes de las organizaciones sociales no han descartado que se produzcan cierres de carreteras y que la protesta se extienda a otras ciudades y regiones del país.
Jaime Nebot, alcalde de Guayaquil, incluso ha dicho que no acatará enmiendas que carezcan de eficacia jurídica. Ello al considerar que una de las enmiendas regula las competencias municipales en los ámbitos de salud y educación, que hasta ahora pueden ejercer los cabildos.
«Yo no voy a hacer caso a eso«, dijo Nebot al recordar programas de entrega gratuita de textos escolares y salud pública que lleva adelante su Municipio, y que es periódicamente auditada por los órganos de control respectivo. (I)
* Con textos de EFE
