Quito, (EFE).- El Gobierno de Ecuador ha expresado formalmente sus disculpas al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, por unos incidentes con manifestantes durante su reciente visita a Quito, pero también ha reclamado por la actitud violenta de la seguridad del mandatario turco.
Así lo señaló el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, durante su habitual informe sabatino, en el que lamentó el que se hayan producido «algunos incidentes» durante la visita de Erdogan a Quito el pasado jueves.
Ese día un grupo de estudiantes y activistas ecuatorianos protestó contra la presencia del mandatario turco en el Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), donde dictó una conferencia.
Algunos manifestantes lograron llegar hasta el auditorio donde Erdogan iba a pronunciar su discurso y le increparon por los supuestos «crímenes» cometidos por su administración contra el pueblo kurdo y por el papel de Turquía en el conflicto sirio.
En ese momento, agentes de la seguridad turca arremetieron de forma violenta contra los estudiantes para desalojarlos del auditorio.
Correa deploró la actitud de los activistas, varios de ellos mujeres, y remarcó que se trataba del presidente legítimo de un país amigo de Ecuador.
Sin embargo, dijo que el «mayor error» fue el de la seguridad turca por arremeter contra los ecuatorianos, incluso sobrepasando la propia actuación de las fuerzas del orden del país.
Correa dijo que hay vídeos en los que se puede observar la reacción de los agentes turcos contra algunas mujeres, a las que calificó de «malcriadas».
«¿Qué buscaban» los manifestantes, «que rompamos relaciones con Turquía?», se preguntó Correa al reprochar a los activistas que protestaron la tarde del jueves en el IAEN.
Sin embargo, insistió en que también fue errónea la actuación de la seguridad turca, por lo que el viernes fue citado a la Cancillería ecuatoriana en Quito el embajador de Turquía en Ecuador, Korkut Güngen, a quien se la ha presentado una protesta oficial.
Según Correa, en ese episodio se conjugaron una serie de errores por parte de la seguridad turca y ecuatoriana, así como de las autoridades del IAEN, el mayor centro académico de postgrado de Ecuador, por no haber fijado filtros adecuados al ingreso de personas al auditorio donde Erdogan iba a pronunciar su discurso.
De su lado, el canciller Ricardo Patiño afirmó que varios de los manifestantes pertenecerían a un grupo opositor de izquierdas y dio detalles de la cita del viernes con el embajador Güngen tras los incidentes.
«Hemos llamado al embajador de Turquía, ayer en la tarde, para decirle dos cosas: En primer lugar expresar las disculpas por el mal momento que vivió el presidente Erdogan», pero también para presentar «nuestra formal y enérgica protesta por una actitud absolutamente inadecuada que tuvo la seguridad turca», dijo Patiño.
«La seguridad de ningún país puede hacer aquí lo que hizo la seguridad turca», por lo que se han pedido las explicaciones del caso al embajador turco. EFE
(I)