Ecuador prevé cerrar 2019 con exportaciones a la Unión Europea (UE) en torno a los 3.300 millones de dólares, la cifra más alta desde que entró en vigor el acuerdo multipartes en enero de 2017.
Así lo aseguró este martes a Efe el presidente ejecutivo de la Federación de Exportaciones (Fedexport), Daniel Legarda, tras recordar que las ventas al bloque europeo el primer año de vigencia del acuerdo totalizaron 3.165 millones de dólares.
Un año más tarde, la cifra aumentó a 3.250 millones de dólares, mientras que en 2016, un año antes de que entrara en vigor el acuerdo, las ventas fueron de 2.830 millones de dólares.
«Este año esperamos alrededor de los 3.300 millones de dólares en exportaciones y 3.000 millones en importaciones», precisó en el marco del III encuentro empresarial Ecuador-Europa que se inauguró hoy y continuará mañana en Quito, y que se extenderá a Guayaquil (suroeste) el jueves y viernes.
Para Legarda, las relaciones de su país con la UE están «en un excelente nivel» con algo más de 5.500 millones de dólares de intercambio comercial en 2018, con una balanza favorable para el país andino cercana a los 500 millones de dólares.
Atribuye el crecimiento «moderado» que prevén para este año a la incertidumbre en Europa respecto al brexit, entre otras cuestiones que «están fuera de nuestro alcance».
Según Legarda, en los dos años de vigencia del acuerdo multipartes, el aumento de exportaciones se ha traducido también en la generación de 22.000 plazas de empleo directas.
«Hay 1.400 empresas en el país que tienen, al menos como uno de sus destinos, algún país de la Unión Europea», que sigue siendo el principal destino para las exportaciones de las medianas y pequeñas empresas (pymes), dijo.
Detalló que unos 200 nuevos artículos se han incorporado a los cerca de 600 que Ecuador ya vendía a la UE.
Aunque Legarda ve mejoras en las ventas de Ecuador al bloque europeo, considera que el mayor desafío del país está casa adentro en términos de mejora de competitividad, productividad y mayor conocimiento sobre la información del mercado.
Además, hace falta que el Gobierno profundice mucho más en la mejora del entorno con adecuadas normas laborables o mayor eficiencia en logística, comentó.
Para Andrea Ferrari, jefe de Cooperación de la delegación de la UE en Ecuador, las relaciones exteriores entre el bloque y el país suramericano «están en su mejor momento» y la comercial es «privilegiada» al estar protegida por el acuerdo multipartes.
Destacó que en el encuentro que se desarrolla desde hoy en Quito hay más de catorce compradores del mercado europeo, cuatro asesores comerciales y decenas de representantes de pymes locales, por lo que expresó su esperanza de que se concreten varios negocios.
Ferrari aseguró que la UE se ha mantenido «como el primer socio comercial» de Ecuador a sus productos no petroleros y anotó que hay aún temas en los que se debe trabajar en conjunto, entre los que mencionó ampliar el conocimiento sobre exportación y la reducción de procesos burocráticos, que encarece costos.
Además -añadió-, el sector privado ecuatoriano debe conocer mejor el mercado de la UE que es «exigente, versátil y dinámico», se deben crear políticas de comercio exterior claras, que fomenten la producción, industrialización y la mejora continua de la calidad de los productos.
Tras recordar que Ecuador es considerado un país de renta media alta, Ferrari destacó la importancia de innovación y uso de tecnología de última generación, entre otros.
«Tengan por seguro que la Unión Europea está dispuesta a seguir apoyando a esta tierra de emprendedores y trabajadores», concluyó durante la inauguración del evento que incluye, entre otros aspectos, charlas técnicas, la presentación de oportunidades de negocio e información sobre aprovechamiento de mercados.
Asimismo, datos sobre las aplicaciones de la economía circular, un sistema de aprovechamiento de recursos donde prevalece la reducción, reutilización y reciclaje de elementos, y en la que «poco a poco, se deben ir incorporando empresas del mundo», según Legarda. EFE