Turquía acusa a EEUU de apoyar a grupos armados que atacan fronteras de la OTAN

Ejercito turco en la operación anti kurda en Siria.

El primer ministro de Turquía, Binali Yildirim, ha acusado hoy a Estados Unidos de respaldar un grupo armado que «ataca las fronteras de la OTAN», en referencia a las milicias kurdosirias Unidades de Protección Popular (YPG), aliadas de Washington en la lucha contra el Estado Islámico (EI).

«Un país con el que llevamos muchos años colaborando en la OTAN abraza a un grupo terrorista. Es muy deprimente que Estados Unidos colabore con una organización terrorista», dijo Yildirim durante un encuentro empresarial en Ankara, transmitido en directo por la cadena CNNTürk.

El Gobierno turco considera al YPG un grupo terrorista por sus vínculos con el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda activa en el sureste de Turquía.

«Desafía la lógica que un país con el que estamos juntos en la OTAN, y que debe proteger las fronteras de la OTAN, preste apoyo, de forma encubierta o abiertamente, a un grupo armado que ataca estas fronteras», dijo el mandatario.

«No se puede aceptar. Nosotros no permitiremos ninguna formación armada en los 1.350 kilómetros de nuestra frontera meridional, de Irán al Mediterráneo, pasando por Irak y Siria, sea al este o al oeste del río Éufrates», insistió Yildirim.

Hasta ahora, Ankara había insistido en que expulsará al YPG únicamente de los dos territorios que controla al oeste del Éufrates: la ciudad de Manbech, a una veintena de kilómetros del citado río, tomada por las milicias kurdosirias en verano de 2016, y el enclave de Afrín, un centenar de kilómetros más al oeste.

Las Fuerzas Armadas turcas lanzaron el sábado pasado la operación Rama de olivo contra el YPG en Afrín, donde se suceden desde entonces intensos combates, pero el Gobierno ha anunciado que una vez terminada esta intervención, empezará otra en Manbech.

Desde el inicio de la operación, el YPG ha lanzado en represalia obuses contra la ciudad turca de Kilis, a escasos seis kilómetros de la frontera norteña de Afrín, y contra pueblos en la provincia de Hatay, al oeste.

El lunes murió un civil en Hatay y ayer, un proyectil que impactó en una mezquita en el centro de Kilis mató a otras dos personas, mientras que el número total de heridos supera medio centenar, la mayoría leves.

Yildirim insistió también en la tesis turca, desmentida por el YPG, de que en el enclave de Afrín se hallan combatientes del EI, si bien la organización yihadista es un enemigo acérrimo de las milicias kurdas laicas.

«Es un combate contra el Estado Islámico. Si Turquía no se mantiene firme en la región, el terrorismo se puede expandir al mundo por todas partes. Esencialmente protegemos la seguridad de Europa», aseveró el primer ministro turco. EFE

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