
El incendio del edificio de la Contraloría del Estado, en el centro de Quito, durante las duras manifestaciones de principios de octubre, pudo ser provocado, según los indicios que la Fiscalía dijo haber obtenido en las investigaciones del caso.
Así lo señaló este miércoles la fiscal general del Estado, Diana Salazar, en una declaración a periodistas tras una ceremonia oficial efectuada en los exteriores de la sede de la Contraloría.
Investigadores, citados por el diario El Comercio, aseguran que en teléfonos celulares incautados se halló un chat denominado Grupo Libertador, que fue eliminado a las 20:00 del sábado 12 de octubre, horas después de que un grupo de encapuchados ingresara violentamente a las instalaciones de la Contraloría, en Quito, en el contexto de las protestas contra la eliminación del subsidio de los combustibles.
Se trata de «una investigación formal que, cuando se haya terminado, vamos a presentar el resultado ante los jueces, y la ciudadanía va a poder conocer la verdad de cómo se planificó, cómo se concretó y se llevó a cabo este tema», dijo hoy la fiscal.
La indagación se centrará «no solamente en la Contraloría, sino en cada uno de los lugares en el país donde pudimos nosotros ver actos que no tienen que ver únicamente con una protesta, sino que pasaron de la línea de la resistencia y se convirtieron en hechos vandálicos«, concluyó Salazar.
Según la Fiscalía, en el chat de Whatsapp del «Grupo Libertador«, supuestamente se identificaba como «Casa Blanca» a la Contraloría y se encontraron mensajes como «Hay que irnos a ese lugar», «diríjanse al quinto piso», «no se descubran los rostros» y «si les cogen, destruyan los teléfonos».

En otros textos se habla de policías y su ubicación. Se describe el número de antimotines, de agentes del grupo de caballería y escuderos, y en qué esquinas se hallan. “Ya vienen por la calle Tarqui”, “hay que salir a recibirlos”, dice un mensaje.
El informe del Cuerpo de Bomberos, también citado por El Comercio, establece que las llamas se iniciaron en los parqueaderos, donde fueron incinerados tres buses y cinco autos. Pero también hay pistas de que se provocaron incendios en el cuarto y quinto pisos, donde funcionaban las áreas de Revisión de Informes y Predeterminaciones.
Otras áreas en donde hubo incendios provocados fueron talento humano, despacho del Contralor General y el lugar en donde estaban las declaraciones juramentadas.
En el expediente judicial también constan como evidencias los videos grabados por las cámaras que no fueron afectadas. En las imágenes se observa a grupos de jóvenes, de entre 15 y 30 años, que ingresan a las oficinas y recorren los pasillos. Los desconocidos se acercan a los escritorios y lanzan los documentos, abren los cajones, esparcen las carpetas por los aires y rompen sillas, puertas y paredes flotantes. La noche del 12 de octubre, un grupo de policías ingresó al edificio desde una terraza, detuvo a adultos y menores de edad.
Los menores capturados han sido defendidos intensamente en redes sociales por los dirigentes de la CONAIE, que celebró su liberación el pasado fin de semana.
