
El pasado jueves, 30 de enero, circuló en horas de la tarde una foto en redes sociales donde estaba una pancarta gigante del correísmo que anunciaba la construcción de una cárcel en los exteriores del Coliseo Yeyo Úraga, en Guayaquil, lo que provocó la reacción de los internautas y transeúntes.
El presidente de la República, Daniel Noboa, publicó ayer la imagen en X y dijo: «Cuando la desesperación te hace cometer errores… Ahora quieren volver al Estadio Yeyo Úraga una cárcel».
El expresidente Correa acusó de mentiroso a Noboa y respondió este viernes, 31 de enero, vía X: «Esta operación de falsa bandera, dirigida y coordinada desde la propia Presidencia, evidencia de cuerpo entero la falta de escrúpulos y de lo que Noboa es capaz de hacer. Todo les falló, y el papelón es de los más grandes de la historia. #NoboaSiempreMiente«.
Correa, además, aseguró hoy en X que Noboa donará ropa retenida en aduanas: «Esto me recuerda cuando en el 2006 derroté a Álvaro Noboa, padre de este presidente por accidente. Álvaro regalaba colchones, cocinas, de todo, aunque al menos era de su plata, ahora es plata del Estado. Se demostró que, como ahora, se podía derrotar a la más inescrupulosa oligarquía. Hoy Daniel Noboa empezará a regalar la ropa retenida en las aduanas, lo cual es hasta peculado. Reciban nomás, pero no vendan su conciencia, ya el país está demasiado destrozado. Este 9 de febrero: TODO, TODITO 5 #NosGobiernanDelincuentes«.
Luisa, candidata presidencial del correísmo, discrepó ayer vía X: «Cuando la campaña sucia nace del propio candidato es porque se ve perdido».
Diego Borja, candidato vicepresidencial del correísmo, alegó: «Cuando la sinvergüencería te hace mentir todo el tiempo. Noboa siempre miente».
Aquiles Álvarez, alcalde de Guayaquil, con imágenes de videovigilancia identificó al culpable del acto y contestó en X: «Este es el que puso la pancarta falsa, el malandro y farmacodependiente que trabaja para la campaña sucia, no le bastó con llevarse en peso todo acá en el muni. Este es el que puso la pancarta. Miren a nombre de quién está el carro. La coca-cola le tiene fundido el mate, lleno de odio y ese odio lo comercializa con los odiadores que hoy están en el poder».
Nota por: David Josue Quispe Franco.